Capítulo 27: ¿Por dónde íbamos?

Cuanto más observaba él su cuerpo semi desnudo, más rápido se extendía la excitación por las venas de Anna, así que en cuanto los labios de Dani atacan a los suyos, ella le devuelve el beso aun con mas pasión y desenfreno que antes. Con firmeza pero con cierto pudor aun, desliza su mano entre ambos cuerpos, acariciando el plano vientre de él, llegando a su ombligo y más abajo, palpando la zona del cinturón, dejando que sus dedos se aferren a este, amenazando con desabrocharlo.

Los suspiros de Dani se alternan con suaves gemidos que se quedan en la boca de Anna. Solo el roce de los dedos de Anna en la zona mas baja del vientre de él, ya producen sensaciones indescriptibles en su cuerpo. Y después de varios escalofríos, él también decide jugar con sus manos entre ambos cuerpos, concretamente en el botón de los tejanos de Anna. Pero no solo juega, sino que sin dudarlo, lo desabrocha y baja la cremallera de debajo.

En cuanto Anna nota como los dedos de él agilmente se deshacen del botón de sus vaqueros, y hacen descender la cremallera. En un sutil movimiento, sin pensárselo demasiado, actúa igual, desabrocha el cinturón, con el cual se lía un poco, y entre risas tontas por su propia torpeza, desabrocha también el botón y hace descender la cremallera del pantalón de Dani. Con un ligero toque en la cinturilla del pantalón, este cae por el peso del móvil y la cartera de él en los bolsillos, a los pies de ambos. Anna, tras esto, pega sus caderas a las de él en un rápido movimiento, dejando salir todo el aire en un gemido algo mas alto.

Pero Dani se separa unos milímetros para deshacerse del todo de sus pantalones, los cuales se habían quedado en sus tobillos. En un rápido movimiento se quita también sus zapatillas y ahora si, de nuevo, pega su cuerpo al de ella, cadera con cadera. Y pone sus manos en el trasero de Anna, pero metiendo sus manos por dentro del pantalón, ya desabrochado. Y lentamente se los baja. Espera a que ella termine de quitárselos, para que ambos queden en ropa interior.

Anna le imita, y separándose ligeramente, se quita también sus converses bajas sin desabrochar. A lo que le siguen sus vaqueros. Se agarra a él entre risas cuando ve que casi se resbala. Aun riéndose, y cuando los pantalones ya están perdidos por ahí, vuelve a besarle con furia. Con una mano, tras colarla por la espalda de Dani, hace girar el pestillo de forma que queden ambos encerrados en esta habitación con baño propio.

Las manos de Dani vuelven al trasero de ella, o algo mas abajo. Y una vez escucha como el pestillo es echado y ambos están aquí sin nadie que pueda verles, agarra su cuerpo haciendo que Anna suba a su cintura y la mueve hasta la cama doble de esta habitación. Deseoso de sentirla la deja tirada suavemente en el colchón y pronto se coloca el encima. Y sintiendo como sus cuerpos se rozan mas que nunca, vuelve a atacar sus labios salvajemente.

Anna tiembla y gime presa de un tremendo placer en cuanto le nota tirado por completo sobre ella, en cuanto nota el roce suave pero decidido de sus cuerpos. Sus manos recorren la espalda de él desde la tira de los boxers hasta el cuello. Y bajan por los laterales de su cuerpo para volver a subir. Lentamente se separa de su boca para descender con sus besos por su mejilla, su mandíbula, hasta llegar a su cuello, donde se entretiene mordiendo y succionando fuertemente. Baja a su hombro, sube a su cuello, así sucesivamente. Mientras, abre un poco mas las piernas dejando que Dani se coloque mejor sobre ella.

Los suspiros de Dani cada vez son mas fuertes y aumentan justo cuando ella abre mas sus piernas y él se acomoda entre ellas. Solo son dos finas telas las que impiden el roce por completo y eso hace que pueda sentirla mucho más que otras veces. Evitando que ella le marque con otro chupetón, en un rápido movimiento cambia los papeles haciendo que sean ahora sus labios los que dominen la situación. Descendiendo por su cuello hasta su escote y aquí, no son solo sus labios los que saborean su piel, sino también su lengua, con la que juega delicadamente por ahí. Y aunque siente que la temperatura esta muy caldeada, él la aumenta cuando su cuerpo se mueve y se desliza sobre el de Anna. Sintiendo mil sensaciones que erizan cualquier rincón de su piel.

Anna siente que se encuentra en el paraíso, no sabe si subir sus caderas para sentirle más aun, o arquear la espalda para sentir su boca sobre su piel mas aun. Decide hacer ambas cosas, levanta ligeramente sus caderas del colchón, y arqueando la espalda todo lo que puede, agarra la cabeza de Dani pegándole más a su piel. Es increíble lo rápido que él cambio los papeles, ahí se nota la experiencia. Sus gemidos son demasiado altos, teniendo en cuenta que sus amigos pululan por la casa aun. Así que se muerde los labios apretando fuertemente los ojos. Nota como su vientre sube y baja a una velocidad indescriptible, debido a la respiración tan agitada que tiene ahora mismo. Apartando las manos de la cabeza de Dani, las deja caer al lado de su cabeza agarrando con fuerza la almohada.

Dani aumenta el ritmo, se mueve mas rápido y siente aun más el cuerpo de Anna pegado al de él. Sus besos siguen en el escote de ella hasta que suben hasta su cuello, cerca de su oreja. - ¿Te g.us.ta.a? - Pregunta como su respiración agitada le permite.

Anna siente demasiado calor. Pero le encanta. - S.si... M.much.o... - Le dice como puede ahora mismo. - ¿T.tu? - Pregunta. Le encanta que él se preocupe por ella, por lo que siente, por complacerla. Pero también quiere que él disfrute, si no, ¿Dónde esta la gracia?

- M.me enc.ant.a... - Responde terminando con un fuerte suspiro que choca en cuello de Anna. Mientras de nuevo cambia el ritmo, haciéndolo más lento pero más marcado, sintiendo con mas fuerza la piel de ella pegada a su cuerpo. Y vuelve a besarla, esta vez en los labios, y muerde su labio inferior con fuerza pero rápidamente lo succiona y lo humedece con su lengua. Y así, va sintiendo como el placer aumenta, hasta el punto que cree que va a explotar.

Anna intenta por todos los medios aguantar los gemidos, pero es que se le da tan bien esto... Agarra la cara de Dani con las manos dentro del beso, y ella misma saca fuerzas de donde no las hay para hacerlo más fiero aun. Pero pronto se cansa de esa postura, y quiere tocar su piel... Lentamente desciende por la ancha espalda de él hasta la tira de los boxers, pero no contenta con ello, cuela los dedos hasta sentir su trasero y poder pegarlo más a ella. Dejando salir un gemido aun mas alto.

Dani se estremece ante el repentino contacto, pero pronto sonríe. Le encanta que ella tenga iniciativa. Sigue besándola y siente como la pasión no termina o disminuye, sino que aumenta a cada segundo. Quiere sentirla un poco mas, así que cuela una de sus manos entre la espalda de Anna y el colchón y con sus dedos juega con el cierre del sujetador. Sabe que ahora nada puede interrumpirles, así que con otro de sus rápidos movimientos, desabrocha el cierre del sujetador y lentamente se deshace de él, lanzándolo sin mirar a donde.

Anna nota como el sujetador desaparece, deja de taparla, es entonces cuando presa de una súbita vergüenza agarra a Dani fuertemente abrazándose a él para que no pueda mirar nada. Es la primera vez que se encuentra tan desprotegida delante de un chico... Pero por una extraña razón, es mejor de lo que creía. Aprovechado que lo tiene tan pegado, y que no puede mirarla, le besa de nuevo, manteniéndole con los ojos cerrados. Pero es un beso más sentido, no tan pasional como con sentimiento.

Dani responde al beso con el mismo sentimiento que ella. Dejando a un lado la pasión y dándose cuenta de como ella se esta entregando a él y de la felicidad que eso le esta provocando. Sin separar sus labios de los de ella, sin dejar que ese sentimiento se esfume, la mano que recientemente ha hecho desaparecer el sujetador, se coloca sobre uno de los pechos que ahora no tienen prenda que los cubra. Y con mucha delicadeza, las yemas de sus dedos viajan por él y por su escote también.

Poco a poco Anna se relaja, se da cuenta de que él esta siendo todo lo delicado que puede. Y agradeciéndole su suavidad le besa dulcemente, hasta que nota como una de sus manos llegan a uno de sus pechos, es entonces cuando un gemido algo mas fuerte que los demás  se escapa de entre sus labios. - ¡Uh! - Es todo lo que dice. Sus dedos descienden entre ambos cuerpos, hasta llega a la tira de los boxers. Cuela los pulgares por dentro, temblorosa, espera un poco a ver como evolucionan las cosas.

La piel de Dani se eriza por completo. Y como un acto reflejo vuelve a besarla pasionalmente y sus dedos se deslizan por los pechos de Anna son mas seguridad. Cansado de estar él encima, se tumba a su lado y la coge fuerte de la cintura poniéndola encima de él. Y cuando ya la tiene como quiere, pone sus manos alrededor de su cuello para pegar ambas bocas y besarla de nuevo.

Anna le sigue el beso pegada a su cuerpo sin dejar ningún tipo de separación. No quiere darle la oportunidad de fijarse aun en su cuerpo. Con los labios desciende a su cuello acariciando los laterales del tronco de Dani, hasta que alcanza la tira de los boxers. Esta a punto de deslizarlos hacia abajo cuando se oyen golpes en la puerta. Anna se separa rápidamente del cuello de Dani y le mira fijamente, "mierda" vocaliza sin sonido. Respira un par de veces intentando regular la voz. 

- ¿S.i? - Pregunta al pasar un rato.

- ¿Anna? ¿Estáis bien? ¡Lleváis mucho tiempo ahí metidos! - Se oye la voz de Mel al otro lado.

Anna mira a Dani buscando una explicación.

- ¡Dile que estamos deshaciendo las maletas! - Le susurra Dani a ella.

- Eh... ¡Si, si! - Contesta Anna. - Estamos... Estamos deshaciendo las maletas, haciendo la cama y demás cosas... - Sigue, intentando parecer de lo mas creíble.

- Ah... Vale... - Contesta Mel, que no termina de creérselo mucho. - ¡Bueno, pues nosotros nos vamos a la piscina esta que esta ahí afuera, climatizada! ¡Cuando acabéis pasaría si queréis!

- ¡Claro! ¡En un rato vamos! - Contesta Anna deseando que ahí finalice la conversación.

- ¡Venga, Chao! - Grita Mel, y se oyen pasos alejarse.

- No se lo ha creído, estoy segura... Que vergüenza... - Murmura Anna enterrando la cara en el cuello de Dani.

- No pasa nada, boba... - Responde él pasando delicadamente sus dedos por la espalda de Anna, a modo de relajarla.

Anna sonríe tiernamente. - Da igual, luego disimulamos mejor y punto... - Le contesta incorporándose un poco encima de él. - ¿Por dónde íbamos? - Le pregunta sexy.

- Tu ibas por aquí... - Le responde ladeando la cabeza para que ella entienda que estaba besándole el cuello.

Anna se ríe traviesa. - Buena memoria... - Le contesta pegada a su cuello ya. Y sigue con sus besos, recuperando lentamente el calor que hace unos segundos su amiga les robo. Acaricia el torso de Dani suavemente, pero con seguridad. - Ummm... Sabes... Muy bien... - Confiesa pasando la lengua por donde hace segundos estaban sus labios.Y vuelve a jugar con la tira de sus boxers.

Dani vuelve a excitarse como antes de que les interrumpieran, o más. Se estremece, su piel se eriza y su respiración vuelve a acelerarse. Presiona sus dedos sobre la espalda de Anna, sintiéndola cada vez más. - G.grac.ia.s... - Es todo lo que su cerebro puede responder en este momento.

Anna sonríe. Le encanta tenerle así, a su entera disposición... Aun sonriendo, baja con sus besos por el pecho de Dani. Se desliza por su cuerpo recorriendo su piel con los labios y la lengua de vez en cuando. Llega hasta su ombligo, incluso más abajo, donde se entretiene por encima de la tira de los boxers. Estos mismos, van descendiendo lentamente, muy lentamente.

Los ojos de Dani se cierran con fuerza. se muerde el labio inferior con intensidad. Esto le esta volviendo loco, muy loco... Resopla una y otra vez y suspira cada vez mas fuerte. Cada movimiento de ella le sorprende y le excita más.

Ella vuelve a subir con su recorrido de besos hasta el oído de él. - ¿Te quito esto? - Le pregunta jugando con sus boxers.